Dalia Ramblas

Esta ubicación está excepcional. El servicio brindado por el Sr. Xavier del personal de recepción era excelente. Lamentablemente, estos estupendos detalles contrastan por completo con lo encontrado en la habitación: espejos rotos, tapetas de madera hinchadas de humedad, secador en el mueble del baño lleno de pelos. Resulta increíble que un hotel con características como estas ofrezca habitaciones en tales condiciones. Al hacer el check-out, se lo comentamos al Sr. Carlos, de quien nos informó que apuntaba esta observación.

Me alojé en un lugar con habitaciones pequeñas, wifi y caja fuerte libre de costo. La posición de la cama contra la ventana no permitía espacio para bajar desde el cabecero. Los conserjes fueron muy amables explicando los lugares para recorrer y lugares para comer. El lugar no tenía desayuno, se encontraba cerca de La Rambla y del metro. La zona era un poco intimidante pero es normal en toda Barcelona.

Este establecimiento está muy bien situado, a sólo 3 minutos caminando de la estación de la Línea 3, que te lleva al Nou Camp, Barcelona Sants y conecta en varios puntos con la Línea 5, que te lleva a la Sagrada Familia. El hotel es bueno, aunque el Internet y el cuidado con los cuartos deja que desear. Aún así, el personal de atención es de primer nivel, siempre estarán dispuestos a ayudar y ofrecer consejos sobre qué ver y hacer en la ciudad.

Destacamos la extraordinaria amabilidad y el servicio que nos ofreció el personal del hotel. Las habitaciones son amplias, cómodas y extremadamente limpias. La ubicación del Hotel Dalia Ramblas es excelente, a solo una cuadra de la Rambla, aunque está ubicado en una calle un poco oscura.

Este Hotel es muy recomendable para lo que se paga. La habitación estaba muy limpia y la cama era muy cómoda. No hubo ningún problema con el ruido. El trato del recepcionista Manel fue excelente, al igual que el del recepcionista del turno de mañana. Sin duda, volveríamos sin pensarlo.