Hotel Medicis

La localización es favorable y los empleados son amables. La estancia en la habitación fue cómoda, pero el iluminado resultaba insuficiente y las vistas no eran nada destacables. El precio final resultó un poco excesivo para la calidad ofrecida, agravado aún más por la tasa turística injustificada.

Me dieron una habitación en la 6 planta. Solo hay ascensor hasta la 5 y tuve q subir cada vez 16 escaleras hasta llegar a mi cuarto. No me avisaron a la hora de la reserva de este inconveniente. Las de la limpieza arrastraron las camas a las 8 de la mañana molesandome. Se escuchaba todo enre habitacions. Muy buena atencion en recepcion. Regalalban agua en el cuarto.

Tuve la mejor experiencia aqui! Me atendieron de lujos, cumpliendo mis peticiones!! Tengo tantas ganas de volver, sinn dudarlo. Ahora ya no hay desayuno bufe pero hay varios sitios cerca para desayunar. No estaria nada mal que hayan una maquinita para bebidas calientes en el hall e incluso un ordenador para los clientes. Pero aparte de eso, sin ningun pero: agua caliente al momento con excelente presion, super limpio, camas comodas, almohadas a tu gusto, terrazita con vistas a la calle insonorizada, aire acondicionado con buen funcionamiento y plato de ducha a peticion. Un saludo muy caluroso al personal!

El Hotel Medicis de Barcelona ofrece una ubicación excelente para los viajeros y un trato amable por parte del personal. La limpieza es impecable y lo mejor es el desayuno, con una variedad increíble: una cafetera con una selección de cafés, fruta, pan, bollería, tortilla, etc. Además, el Hotel Medicis proporciona agua todos los días de forma gratuita. Para completar, hay una parada de autobús enfrente del hotel que te llevará a todos los lugares que quieras ver. Mi mujer lo escogió por la cercanía de la Fundación Puigvert, a la que acudí durante 5 días, y decidimos volver en otra ocasión para disfrutar como turistas. Muchas gracias al personal durante toda la estancia por su atención y buen hacer.

Lo que más me gustó es que todo estaba muy limpio y el personal era muy amable. Estaba ubicado cerca del Metro Sant Pau y a unos 10 o 15 minutos caminando de la Sagrada Familia. Lo que no me gustó fue que nos tocaron habitaciones interiores con vista a un edificio de departamentos, la habitación era muy pequeña y el colchón y las almohadas eran de mala calidad. Tuve que aguantar ruido de otras habitaciones, incluso el ruido de la taza del baño de la habitación contigua cuando tiraban la cadena.